Falsarius Chef. Aunque no conozcamos su nombre, todos sabemos quién es este señor que nos intenta engañar con la comida. «Engañar a la vista, al olfato, al gusto y hasta al bolsillo», como dice él. Siempre es un placer entrevistar a alguien así.
- Para entrar en calor, Falsarius. ¿No da un poco de rabia ser conocido popularmente como un impostor gastronómico?
Ninguna rabia. Para mí es un orgullo absoluto. Cuando veo que la gente dice o escribe cosas cómo “hoy para comer, un falsarius”, como sinónimo de comida caserita, improvisada y con trampa, no quepo en mí de gozo. Y es raro que no quepa porque últimamente he engordado un par de kilos.
- La fama desde luego te la has ganado. Numerosos libros publicados en los que aconsejas sobre cómo engañar con la comida. ¿Qué es lo que más te gusta de lo que haces?
Vivir del cuento. Que un tipo se gane la vida con unas gafas de plástico y una nariz postiza es la palpable demostración de que el mundo está muy loco.
- “Como los Rolling Stones o la Pantoja” Falsarius tiene hasta un libro de Grandes Éxitos. ¿Por qué crees que tu cocina se ha hecho tan famosa?
Es una cuestión estadística. Hay mucha más gente que no tiene ni idea de cocina que gente que cocine bien. Mi cocina es perfecta para vagos, inútiles gastronómicos y/o torpes de cucharón. Si yo soy capaz de hacer una receta, cualquiera va a ser capaz de hacerla.
- Ya sabes que nosotros somos de bares, y que muchas veces nos sentimos engañados (en el mal sentido) con las tapas. ¿Podrías dejar aquí un par de ejemplos de tapas fáciles y baratas para los taberneros que nos lean?
Pues mira, por ejemplo, el pincho antiresaca que siempre sienta bien, y unos picatostes con anchoas y alioli que invitan a pedir una segunda caña seguro.
- Por muy “impostor” que seas, no soportas los microondas, herramienta predilecta en muchos bares. Hasta afirmas que has oído cómo atacaban a sus propietarios. ¿Qué pasa con ellos?
Les tengo manía. Son un trasto inútil que al final sólo usas para calentar el colacao o para secar calcetines húmedos cuando tienes prisa (que conozco gente que lo hace). Dejan la comida arrebatada, como si hubiera tenido un ataque epiléptico.
- Hablemos de cervezas ahora. ¿No tendrás algún truco para que una cerveza del Día nos sepa a Estrella Galicia Especial, no?
Milagros todavía no hago. Estoy haciendo un cursillo, pero hasta que no me den el diploma…
- Nos encantaría que nos contaras también con qué las suele acompañar un experto de las latas.
Una cerveza fresquita y rica y una buena lata de berberechos es una mezcla difícilmente superable.
- Ya para terminar, algo que pedimos a la mayoría de nuestros entrevistados. ¿Nos podrías recomendar algún bar de tapas que te guste visitar cuando estás en Madrid?
Hace años que no vivo en Madrid y voy poco y con prisas. Me encantaba ir a la Cruz Blanca (donde coincidía mucho con Tip, el de Tip y Coll) o a la cervecería Santa Bárbara y tomarme un barro con unas gambas o un poquito de mojama. Y con unos berberechos, claro.
